El encargo era claro por parte de las áreas de educación y de promoción económica del Consejo Comarcal de Osona: diseñar un acto para conseguir que 400 adolescentes de entre 10 y 12 años fueran los protagonistas del final del proyecto CUEME, un proyecto que promueve la cultura emprendedora en la escuela.
Los alumnos habían creado de cero varias cooperativas asistiendo a todos los procesos necesarios: constitución, definición de producto, producción y ventas.
No teníamos ninguna duda de que el punto y final debía ser la comunicación. Así que ideamos tres grandes bloques de trabajo:
-Speed dating:
Promovimos que más de 300 alumnos practicaran una técnica cada vez más común en los entornos de la emprendeduría dándoles un minuto y medio para explicar su proyecto al compañero de delante.
Una bubuzela marcaba el cambio de lugar. En poco más de 45 minutos, conseguimos que los chicos y chicas hubieran conocido los 13 proyectos CUEME de la comarca de Osona y a 13 nuevos compañeros.

-Siete de prensa:
En paralelo, los miembros de las comisiones de comunicación de cada cooperativa eran entrevistados en un set de prensa real.
Todos aprendieron a manejar la presión de tener que argumentar ante cámaras, iluminación y compañeros, sin saber exactamente qué les pedirían.

El acto se cerró con un último bloque en el que con diversas dinámicas de grupo, los participantes tuvieron que hacer un esfuerzo de síntesis de los aprendizajes realizados.

El final del acto CUEME en Osona fue un acto pensado desde y para la comunicación. Los 400 hombres y mujeres que participaron aprendieron a: hacer un pitch de un minuto y medio para seducir personas que no coneixene; argumentar ante las cámaras los pros y contras de sus proyectos y comprobar que sintetizar siempre es más difícil que rellenar hojas con paja.
Por nuestra parte, aprendimos que los adolescentes, cuando se les da autonomía y la comunicación como instrumento, son increíblemente potentes!

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